Este año he renovado el parque televisivo familiar. Empezamos por pillarnos una tele plana y dejar la antigua aparcada para otros menesteres. Avisé después a un antenista porque no había forma de sintonizar ningún canal digital (y la recepción de los analógicos era verdaderamente lamentable). Cual no sería nuestra sorpresa cuando descubrimos que se nos abría un nuevo mundo de sensaciones al visualizar nada menos que veintiocho posibles nuevos canales ¡28!. Con un poco más de detenimiento llegamos a la conclusión que la cosa no era, ni con mucho, para tanto. Del total había que restar un par de ellos que nunca reciben señal, otros pocos más que se dedican casi en exclusiva a servir de plataformas mercantiles para productos inverosímiles, otros más son la versión digital de su equivalente analógico y adjunto a ellos, uno o dos canales que ofrecen reposiciones de los productos audiovisuales de esas mismas cadenas. Sin señal, tienda, repetición y lo mismo de antes. En definitiva, que con el cambio, vengo a ver prácticamente lo mismo de antes:
"300 canales y nada que ver", como auguraban los Microsiervos en"TDT:Demasiado poco y tarde".
Si esta es la revolución digital, que venga Dios y la vea...
Por cierto, a la antigua TV le he tenido que un sintonizador TDT nuevo ad hoc. Visto el panorama, tengo mis dudas sobre si estos aparatejos podrán soportar la avalancha de la TDT de pago y la posible interactividad que promete el nuevo medio. Sobre la TDT de pago, en mi caso lo tengo claro, no pienso gastarme un céntimo; lo que sí me preocupa es que los canales en abierto queden reservados para reposiciones, producciones obsoletas y anuncios, anuncios y más anuncios publicitarios, mientras que lo interesante vaya a los canales de pago.
Menos mal que siempre nos quedará Internet....Actualización 27/08/09:
Certero análisis del tema en Microsiervos en un post cuyo título ya lo dice todo:
La TDT de pago y los codificadores que no sirven para nada
En el mismo post, unas viñetas que no he podido resistir reproducir aquí por lo tremendamente acertadas (Jesús Martínez del Vas , Miércoles en la redacción (LVI), 233grados) y porque más valdrá tomarse estas cosas con humor ...