domingo, 31 de diciembre de 2006

Ultimo post del año

Ultimo post del año.

De regalo, un Christmas, con su árbol de Navidad, su estrellita reluciente y dos pastorcillos autóctonos.

Lo que sigo sin comprender muy bien es por qué hay que disfrazar a la niña de asturiana cuando se la quiere pasar por pastorcita.


Feliz año a todos....

Gracias por mantenerse atentos a la pantalla y visitar este blog de cuando en cuando.

sábado, 30 de diciembre de 2006

Francaise....

Acabado el post anterior me topé con heart-in-tears. A pesar del título, la autora escribe (y siente) en francés. Este idioma me devuelve a tiempos pasados, a la infancia y la adolescencia en un colegio donde, en un principio, el único idioma extranjero que se podía cursar era ese. Poco más tarde llegó el inglés, arrasándolo todo. A mi eso no me tocó, ya digo, y mi dominio de la lengua anglosajana es absolutamente nulo, aparte de poder traducir algún texto científico con el diccionario en la mano y poco más. Tampoco se puede decir que domine la lengua de Moliére y Descartes, ni muchísimo menos. Lo poco que sabía, que no era tanto, lo he ido olvidando. Eso sí, me queda una cierta simpatía por el idioma, un cierto reconocimiento de algo ancestral cuando me encuentro accidentalmente con él, algo así como la familiaridad que se tiene cuando uno se encuentra con una pariente que hace años que no ve. Y no sé si es por eso o porque, además, este idioma tiene una sonoridad especial, una cadencia musical innata, que cuando leo cosas como ésta:

Adieu monde car il ne faut pas se fier à toi,et le temps manque pour jouir de toi,
en effet, chez toi, monde, le passé est bien passé, le présent nous glisse les mains, l'avenir ne commence méme pas, que la chose la plus ferme tombe, la chose la plus riche fait faillite, et meme la chose la plus durable bientot meurt.

O esta otra:

Je ne fais qu'aimer, je ne sais qu'aimer.
Avec des moyens médiocres , vous savez qu'on peut beaucoup quand on les réunit tous à un seul objet.

O esto otro más:

Je meurs dans les bras de mon fidéle amant
Et ..
C'est dans cette mort que je trouve la vie.


Me llega directamente a cierta fibra sensible que tenía adormecida.

Y si bien no conozco el significado de todas y cada una de las palabras, soy capaz de leerlas y escucharlas por dentro y , pienso, de comprender el significado profundo de la frase, un significado que tiene más que ver con esa sonoridad extraña y remotamente familiar que con la traducción literal de las frases....

Enlaces

En post anteriores dejé un inocente enlace a cierto Ensayo sobre Watchmen , obra de Yeray-Muad'Did, que recomiendo vivamente leer con tranquilidad y atención.
A más de uno, quizá, le habrá sonado el apellido de este autor e incluso ya alguien se pregunmtará si no será este buen Yerai pariente más o menos lejano de Paul Atreides, más conocido entre los fremen de Arrakis como Paul Muad'Did. El caso es que, exista o no ese parentesco, Yerai se ha convertido en cronista y analista del extraño e inquietante Universo de Frank Herbert, la enigmática y clásica Dune.

El Ensayo sobre Dune es un buen estudio que puede servir de guía para navegantes que osen adentrarse en este cosmos dominado por la Cofradía CHOAM, la Bene Gesserit, las Grandes Casas, la especie melange, el Emperador Padishah Sadam IV, los Sardaukar, los gusanos de arena y los fremen. Aquí se encuentran claves, faros y puntos de referencia para no extraviarse demasiado y no acabar, por ejemplo, en manos de los despiados Harkonnen.
Además de la obra de Herbert padre (a Herbert hijo lo menciona sólo por encima, y creo que hace bien), el Ensayo toca las adaptaciones que de Dune se han hecho en otros medios. Desde la fallida (pero clásica, inquietante y sugerente) Dune de David Lynch, pasando por los lápices de Sienkiewitz de la Marvel, los intentos de Jodorowsky y Moebius (con un casting que hubiera incluido al mismísimo Dalí) o por diversos juegos para ordenador.
Ya digo, un Ensayo digno de pausada lectura.

En otra órbita totalmente distinta, recomiendo pasarse a leer el siguiente post dedicado a esto de la Navidad:
¡Ho, ho, ho...boom! pone el dedo en la llaga y analiza,desde una óptica puramente científica, la posibilidad de la existencia de Papá Noël.
Niños abstenerse.

Blog-Mundi, Blog de obligada lectura para los habitantes de la Blogosfera. Ahora con eso de la nueva versión Beta de Blogger (que ya no es Beta) viene bien un vistazo a artículos como éste.

Por cierto, nuevo invento, Blogissimo, Blog de Bloggers, nuevo Directorio de Blogs. La Blogosfera está en continua expansión y utilidades como ésta nos pueden ayudar a encontrar o seguir los Blogs que nos interesan. Tiene un diseño muy atractivo y una buena organización en categorías. Habrá que empezar a seguirlo.

A partir de una entrada de Psicobyte, me enteré de la existencia de Orsai. Aunque no he leído todos sus artículos, me parecieron magníficos su entrevista al “Taquero chorro” y la crónica sobre el ascenso repentino de Karen Thomson.

Y de postre, un clásico, Septimio Severo Emperador. En Roma-Victrix, naturalmente.

Y por hoy creo que ya está bien. Les dejo con una hermosa puesta del Sol (Canopus) de Arrakis.





P.D. En la Wikipedia hay una categoría enterita dedicada a Dune, con alrededor de 52 artículos. Afición por el tema parece que hay....

jueves, 28 de diciembre de 2006

Historias de cómics....


En esto de los cómics hay una serie de temas recurrentes que son un poco como los antiguos Ojos del Guadiana, que afloran, discurren, se meten dentro de la tierra y, al cabo del rato, vuelven a surgir como si nada.
Uno de estos temas lo ha apuntado Rafa Marín en su Crisei: el precio de los tebeos. Un tema y un artículo con múltiples derivaciones y con muchas ideas y sugerencias.
Una de las conclusiones que he sacado después de leerlo es que los viejos tiempos de los tebeos baratos en los kioscos parece haber desaparecido. Es cierto que hay intentos de recuperar ese magnífico punto de venta en la calle, pero también lo es que cuando uno quiere algo que se sale de las colecciones habituales debe recurrir a la tienda especializada de su ciudad o pedirlo en las librerías especializadas que trabajan en Internet.

Porque a pesar de las múltiples convenciones, ferias y festivales dedicadas al cómic, a pesar que a esto de hacer historietas se le ha dado en denominar el Noveno Arte, a pesar de sesudos estudios publicados sobre personajes y editoriales de este mundo... a pesar de todo eso, es muy difícil encontrar las obras clásicas que han marcado a este género en una Librería “convencional” medianamente dotada.
Si acaso los Asterix o los Mortadelos en la sección de libros infantiles y juveniles.

Preguntar por Watchmen, Flash Gordon, Mort Cinder, La Casa Dorada de Samarcanda, la Doom Patrol, Corto Maltés en Siberia o Paracuellos me parece que tendrá como resultado el asombro y pasmo del librero ante unos títulos de los que jamás habrá escuchado ni nombrado. Pruebe entonces el deventurado lector por Moore, Raymond, Oesterheld, Pratt, Breccia, Morrison, Foster, Miller, Kirby o Gibbons y obtendrá una cara de asombro aún mayor, y se verá observado como un extraño animal en vías de extinción. O como un desequilibrado de la peor especie, si no algo peor....

Curioso: perdimos el kiosco pero no ganamos la Librería.

En el fondo, quizás, esto de los cómics es sólo para frikis nostálgicos, personas que se disfrazan de Batman o Spiderman en carnavales y que no hay que tomar demasiado en serio. Total, lo que hacen es leer tebeos...a su edad.

Porque eso es otra.

No conozco si existen estudios de mercado sobre ese hipotético destinatario del tebeo pero me temo, por lo que leo en Internet y lo que veo en las Aulas, que el lector de comics de hoy resulta ser, en la mayoría de los casos, varón, de más de treinta (y cuarenta años), con cierto nivel de estudios y cierto nivel económico. No sé si existen esos estudios de mercado pero lo cierto es que una parte importante de lo que se edita parece destinado a ese hipotético lector treintañero largo o cuarentón que quiere recuperar unas lecturas algo olvidadas o a las que no pudo acceder en su día. Y que, aún a pesar de los precios a veces sin sentido, dispone de los medios económicos para acceder a unas obras que salen por un pico. Por medio, lo malo, es que nos podemos dejar una generación que va a crecer sin conocer este medio, sin saber valorarlo y disfrutarlo. Y eso es una lástima.

Me parece a mi, vaya.

Historias de cómics(2)....


Quizás ha sido la broma que Blogger ha elegido para celebrar el Día de los Inocentes o quizás una suerte de maleficio que tiene la Red, lo cierto es que el post de ayer apareció doblemente publicado. Así que, he aprovechado para hacer alguna modificación al post original y ahora procederé a eliminar la copia. Ya puestos , dejo alguna imagen para animar al personal a que siga atento a la pantalla y disculpe los fallos técnicos....


PD. Sobre Watchmen

Bueno, lo último. Se ha producido además, una extraña distorsión temporal. Este post debía suceder al que a quedado delante y no al revés.Lo siento, pero no tengo ganas de arreglar el desaguisado, que me imagino que se solucionaría cortando y pegando y cortando y pegando. Y lo mismo por el camino se me pierden los dos artículos. Así que va a ser que no.

Sigan disfrutando de las fiestas ...

¡Música, maestro!

martes, 26 de diciembre de 2006

Until the end of the world

Anda uno un poco perdido y alejado de este blog, lo reconozco. Me imagino que son cosas que pasan y hay temporadas en que apetece escribir en Internet y temporadas en que no se tiene ni la más mínima gana. Eso sin contar con que otros avatares de la vida real releguen, marginen o imposibiliten el disfrute de la vida ciberespácica. Son cosas que pasan y ya está.
Sobre lo último que he estado pensando, viendo y viviendo, me gustaría ser hoy un poco catastrofista.
Publican en un diario de reconocido prestigio, que 2500 científicos no pueden equivocarse y que el planeta se va al carajo. Vamos, eso en lenguaje coloquial. El texto realmente nos dice que 2500 científicos avalan el hecho, de sobras conocido, de que el planeta se está calentando. Y que no es por señalar, pero que resulta que desde un tiempo a esta parte las concentraciones de dióxido de carbono y de metano están por las nubes. Y que no es por señalar, pero que lo mismo la culpa la tienen los coches que andan con gasolina y gasoil, las centrales térmicas que queman carbón, gas o gasoil para producir electricidad, los barcos y aviones que van como locos quemando más queroseno, gasoil o lo que sea... y que no es por señalar, pero que ya está bien y que de aquí a menos de cien años las temperaturas pueden subir 2 o 3 grado como poco y que ya hay una parte de cambio climático que resulta irreversible y más vale ir pensando en cómo vamos a capear el temporal de sequías, inundaciones, subida del nivel del mar, deshielo de los polos, y ese tipo de cosas. El cielo se nos cae encima.
Hace poco pusieron en la tele, un poco de tapadillo como es normal, una película de Win Wenders que no había visto (de hecho, aparte de Paris, Texas, poco más he visto de este hombre). Para mi, un director de difícil catalogación, unas películas para nada convencionales, unas imágenes, en todo caso, que se quedan grabadas en la retina y que al cabo de los días se repiten y se repiten, unas escenas sugerentes y enriquecedoras. En este mundo tan irreal y tan cercano que nos pinta Wenders, unos protagonistas se esfuerzan en una aventura personal laberíntica y sorprendente, cuyo fin no se presiente y, de fondo, nos vamos enterando que el mundo, otra vez, esta al borde del precipicio, esta vez por culpa de un satélite y algo de una explosión nuclear. Este anuncio es tan difuso y se le presta tan poca atención como a tantos miles de avisos que recibimos casi a diario, sin entender muy bien ni qué es lo que pasa ni por qué. Al cabo de un rato, los protagonistas descubren que esta vez sí que es verdad. De repente los aparatos eléctricos dejan de funcionar. Y todos sospechan que esta vez sí que es, que esta vez alguien fue demasiado lejos y apretó el botón. Con total naturalidad, se afronta el desastre anunciado.
Así estamos hoy, con 2500 científicos diciéndonos lo que ya sabemos desde hace más de veinte años, con políticos que firman tratados internacionales para luego no cumplirlos porque no son capaces (ni tienen ninguna gana) de poner orden en su propia casa. No se puede firmar un Tratado de Kioto para luego permitir un urbanismo y una especulación del suelo para cualquier municipio que tenga un cachito de tierra,que genera despilafarro energético (aparte de satisfacer antes a unos bebeficios privados que los beneficios de toda la comunidad, aparte de destruir el paisaje y convertir encinares y bosques mediterráneos en insulsas praderas donde algunos se puedan permitir jugar al golf....)
Ya lo dije antes, hoy, a pesar de haber conseguido el Transformer, el Lego y la Caravana de los Lunnis, estoy un poco catastrofista.

...y ha pasado un añito más.


Hace como cosa de un año me lamentaba amargamente de que, después de haber revuelto Roma con Santiago y de ir de la Ceca a la Meca, todos mis desvelos habían resultado infructuosos y me fue imposible conseguir la Agathita Mil Caritas para el componente más pequeño de mi pequeña familia.
Nada.
No hubo manera.
Ni movilizando a titos y abuelos que viven en la gran ciudad y que también se patearon hipers e hipers sin resultado.
Este año ha estado a punto de repetirse la historia.
Pero no.
Esta vez sí que cada uno tiene lo suyo, conseguido tras un razonable esfuerzo familiar.
También es verdad que fuimos algo más avispados y a mediados de diciembre ya compramos los regalos, que si no, no sé.
Para satisfacer la curiosidad de los lectores, paso a enumerar los nuevos habitantes de esta casa:
  • Un Aeropuerto Lego fantástico.
  • Y una Caravana de los Lunnis increíble.
  • También un Transformer (el Optimus Prime)
  • y un armarito de madera.

No se imaginan algunos lo que descansamos los padres al ver la cara de satisfacción de sus retoños abriendo paquetes y descubriendo las "sorpresas", ...

y el profundo suspiro de alivio por haber sido capaces de conseguirlas.

viernes, 24 de noviembre de 2006

Conversaciones en la merienda

Así como así, entre colacao y colacao me sueltan estas perlas, auténticas cargas de profundidad:

-Papá...
(me muestro atento)

-...somos animales
(me ha cogido desprevenido, de momento, un par de segundos, sin respuesta. Mientras, medita sobre lo dicho y matiza:)

-....Animales que hablan.

(...como esta niña siga así va a acabar regentando una Cátedra de Filosofía en la Sorbona)

domingo, 19 de noviembre de 2006

el Everest ese...

una montaña más alta que la torre del asilo...-¿Sabes si ha subido alguien al Everest o a la torre del asilo?

-Hombre, la verdad, la verdad, es que al Everest sí sé yo que han subido, pero en lo alto de la torre del asilo no he visto yo nunca a nadie.

-Ni para limpiar el tejado, seguro....Sí, al Everest ya ha subido gente, lo sé. El otro día subieron Carlos y el padre de Carlos....sí....

(sí, ya)

el padre de Carlos superando todos los obstáculos...-...el padre de Carlos casi no podía subir...se le salía la saliva y too...

(ahí ya no pude más, me imaginé al pobre padre, que no es íntimo amigo mío pero que al menos nos vemos cuando nos toca recoger del cole él a su hijo y yo al mío, y la verdad, parece una persona que le gustan los placeres de la mesa, y de verdad, que si ese pobre padre le toca subir el cerro de la esquina, desde luego que echa la saliva, y también la hiel, las higadillas y todo lo que tenga dentro...iba conduciendo pero tuve que parar para poder reírme a gusto...)

Qué increíble capacidad de fabulación...

miércoles, 1 de noviembre de 2006

La Ley de los niños que se despiertan temprano los días de fiesta...

Hay una Ley no escrita, (pero que estadísticamente se cumple a rajatabla, al menos en mi hogar), que dice que un tierno infante, (o los dos), presenta la tendencia irresistible de levantarse temprano (o MUY TEMPRANO) las mañanas de fiesta.


Y el corolario de esta Ley dice que lo peor no es que él o ella o los dos se levanten (si quieren madrugar es cosa suya), o que vayan al servicio y hagan algo de ruido (bueno, vale, es normal), lo peor suele ser su insana costumbre de dirigirse al dormitorio donde descansan sus progenitores, despertarlos y obligarles bajo coacciones innombrables a que acudan a la cocina y les preparen su Cola Cao.


Entre semana y los días laborables, paradójicamente, es justo al contrario: hay que ir a su habitación, arrancarlos de la cama para vestirlos, que desayunen y llevarlos al cole.

La Naturaleza Humana, qué gran misterio.

P.D. Aprovecho para recomendar una visita al blog de Azulica que acabo de descubrir ahora mismo buscando imágenes para ilustrar este madrugador post.

lunes, 30 de octubre de 2006

series de televisión, internet y un amigo del trabajo...

Hace poco un compañero de trabajo me ha pasado un par de discos con la primera temporada de una serie americana que se ha bajado de Internet. Este fin de semana he comenzado a ver este material y me han asaltado una serie de ideas de forma demoledora.

En primer lugar que en esto de hacer series para la televisión, el mundo anglosajón le da sopas con onda a lo que se hace por aquí. Habrá veces que te pueda gustar más o menos lo que hacen pero lo que no se puede negar es que el producto está cuidado hasta en los detalles más nimios: las cabeceras de la serie invitan a verla, los personajes están bien trazados, las situaciones que se plantean logran interesar, los diálogos resultan inteligentes y creíbles, la ambientación suele ser impresionante, la asesoría científica resulta manifiesta y, en definitiva, el trabajo de los guionistas es para levantarse el sombrero y aplaudir ese derroche de imaginación y talento. Curiosamente, imaginación y talento que hace tiempo que faltan en las producciones cinemtográficas. Cabe preguntarse si no se ha producido una fuga de cerebros desde un medio hacia el otro y por qué motivos se haya podido producir.

En segundo lugar pensé que o mi compañero de trabajo es un privilegiado o bien que yo soy un pringao. Que eso de la brecha digital es una verdad como un templo. Haciendo unas sencillas cuentas, resultaba que para poder instalarme una conexión con más o menos la mitad de ancho de banda que mi amigo, a mi me tocaba pagar más o menos el doble de lo que a él le cuesta la suya. Que él, por vivir donde vive resulta que tiene acceso a una serie de ventajas que yo ni siquiera puedo soñar ( a no ser que acceda a pagar el doble por la mitad...). Va a ser que soy un pringao digital.

Por último me pareció que va a haber que replantearse la televisión en el futuro (que para algunos ya es el presente). Que no me parece comprensible como se relegan y maltraten las series de tv en las distintas cadenas (¿alguien sabe donde han acabado los 4400?¿soy yo el único que se ha sentido ninguneado con la programación tan extraña de 24 este final de verano?) y que si quien tiene que buscarles un sitio accesible al televidente no lo hace, quien tenga posibilidad se va a bajar la serie de Internet y acto seguido se la va a poner tan tranquilamente en su reproductor DVD (que quizás hasta tenga Home Cinema incorporado) y va a abandonar, aburridoy nhastiado, la “programación habitual”. Que no es ciencia ficción, que ya mi compañero lo hace tan ricamente y pasa de aguantar horarios escandalosos, interrupciones publicitarias más escandalosas todavía y de hacer zappings interminables para encontrarse con que la mayoría de las cadenas emiten la misma enervante telebasura.


domingo, 22 de octubre de 2006

No sé por qué me dedico a esto. Si lo supiera, probablemente no tendría necesidad de hacerlo. Lo único que puedo decir, y de eso estoy completamente seguro, es que he sentido tal necesidad desde los primeros tiempos de mi adolescencia. Me refiero a escribir, y en especial a la escritura como medio para narrar historias, relatos imaginarios que nunca han sucedido en eso que denominamos mundo real. Sin duda es una extraña manera de pasarse la vida: encerrado en una habitación con la pluma en la mano, hora tras hora, día tras día, año tras año, esforzándose por llenar unas cuartillas de palabras con objeto de dar vida a lo que no existe…, salvo en la propia imaginación. ¿Y por qué se empeñaría alguien en hacer una cosa así? La única respuesta que se me ha ocurrido alguna vez es la siguiente: porque no tiene más remedio, porque no puede hacer otra cosa.

Esa necesidad de hacer, de crear, de inventar es sin duda un impulso humano fundamental. Pero ¿con qué objeto? ¿Qué sentido tiene el arte, y en particular el arte de narrar, en lo que llamamos mundo real? Ninguno que se me ocurra; al menos desde el punto de vista práctico. Un libro nunca ha alimentado el estómago de un niño hambriento. Un libro nunca ha impedido que la bala penetre en el cuerpo de la víctima. Un libro nunca ha evitado que una bomba caiga sobre civiles inocentes en el fragor de una guerra. Hay quien cree que una apreciación entusiasta del arte puede hacernos realmente mejores: más justos, más decentes, más sensibles, más comprensivos. Y quizá sea cierto; en algunos casos, raros y aislados. Pero no olvidemos que Hitler empezó siendo artista. Los tiranos y dictadores leen novelas. Los asesinos leen literatura en la cárcel. ¿Y quién puede decir que no disfrutan de los libros tanto como el que más?


En otras palabras, el arte es inútil, al menos comparado con, digamos, el trabajo de un fontanero, un médico o un maquinista. Pero ¿qué tiene de malo la inutilidad? ¿Acaso la falta de sentido práctico supone que los libros, los cuadros y los cuartetos de cuerda son una pura y simple pérdida de tiempo? Muchos lo creen. Pero yo sostengo que el valor del arte reside en su misma inutilidad; que la creación de una obra de arte es lo que nos distingue de las demás criaturas que pueblan este planeta, y lo que nos define, en lo esencial, como seres humanos. Hacer algo por puro placer, por la gracia de hacerlo. Piénsese en el esfuerzo que supone, en las largas horas de práctica y disciplina que se necesitan para ser un consumado pianista o bailarín. Todo ese trabajo y sufrimiento, los sacrificios realizados para lograr algo que es total y absolutamente… inútil.


La narrativa, sin embargo, se halla en una esfera un tanto diferente de las demás artes. Su medio es el lenguaje, y el lenguaje es algo que compartimos con los demás, común a todos nosotros. En cuanto aprendemos a hablar, empezamos a sentir avidez por los relatos. Los que seamos capaces de rememorar nuestra infancia recordaremos el ansia con que saboreábamos el cuento que nos contaban en la cama, el momento en que nuestro padre, o nuestra madre, se sentaba en la penumbra junto a nosotros con un libro y nos leía un cuento de hadas. Los que somos padres no tendremos dificultad en evocar la embelesada atención en los ojos de nuestros hijos cuando les leíamos un cuento. ¿A qué se debe ese ferviente deseo de escuchar? Los cuentos de hadas suelen ser crueles y violentos, describen decapitaciones, canibalismo, transformaciones grotescas y encantamientos maléficos. Cualquiera pensaría que esos elementos llenarían de espanto a un crío; pero lo que el niño experimenta a través de esos cuentos es precisamente un encuentro fortuito con sus propios miedos y angustias interiores, en un entorno en el que está perfectamente a salvo y protegido. Tal es la magia de los relatos: pueden transportarnos a las profundidades del infierno, pero en realidad son inofensivos.


Nos hacemos mayores, pero no cambiamos. Nos volvemos más refinados, pero en el fondo seguimos siendo como cuando éramos pequeños, criaturas que esperan ansiosamente que les cuenten otra historia, y la siguiente, y otra más. Durante años, en todos los países del mundo occidental, se han publicado numerosos artículos que lamentan el hecho de que se leen cada vez menos libros, de que hemos entrado en lo que algunos llaman la “era posliteraria”. Puede que sea cierto, pero de todos modos no ha disminuido por eso la universal avidez por el relato. Al fin y al cabo, la novela no es el único venero de historias. El cine, la televisión y hasta los tebeos producen obras de ficción en cantidades industriales, y el público continúa tragándoselas con gran pasión. Ello se debe a la necesidad de historias que tiene el ser humano. Las necesita casi tanto como el comer, y sea cual sea la forma en que se presenten –en la página impresa o en la pantalla de televisión–, resultaría imposible imaginar la vida sin ellas.


De todos modos, en lo que respecta al estado de la novela, al futuro de la novela, me siento bastante optimista. Hablar de cantidad no sirve de nada cuando nos referimos a los libros; porque no hay más que un lector, sólo un lector en todas y cada una de las veces. Lo que explica el particular influjo de la novela, y por qué, en mi opinión, nunca desaparecerá como forma literaria. La novela es una colaboración a partes iguales entre el escritor y el lector, y constituye el único lugar del mundo donde dos extraños pueden encontrarse en condiciones de absoluta intimidad. Me he pasado la vida entablando conversación con gente que nunca he visto, con personas que jamás conoceré, y así espero seguir hasta el día en que exhale mi último aliento.


Nunca he querido trabajar en otra cosa.


miércoles, 18 de octubre de 2006

Hay días que es que...vaya...

Hay días en que parece que los Hados se burlan de uno. O de una. Más o menos es lo que me vino a decir mi señora cuando llegó a casa después del trabajo, a eso de las tres y media pasadas después de haberse levantado antes de las siete para poder llegar a tiempo al trabajo. No es que esté muy lejos, lo que pasa es que hay ya mucha gente que vivimos a diez kilómetros del trabajo y lo que antes era una desierta y bucólica carretera comarcal que se hacía en quince minutos escasos, ahora se convierte, en horas punta, en una auténtica trampa para conductores. Al final ha decidido llegar media hora antes a trabajar que media hora después.
En fin, que después de llegar a las y pico a comer, empieza a contarme las penalidades del quehacer cotidiano y comienza a relatar algo referido a unos albañiles que le habían dicho algo por la calle.
En ese momento agucé el oído.
Que sí, que hacía tiempo que no le decía nadie nada por la calle y que hoy mismo al ir a desayunar y pasar por delante de una obra (una de tantas, en cualquier calle hay dos o tres) un operario de la construcción que estaba en un andamio le dice a voces a otro que está abajo en la calle que en qué está pensando y que le pase ya la mezcla para los ladrillos, que si está hoy dormido y eso. Y el otro le replica con gestos y a voz en grito:

-Qué todavía está de muy buen ver.

Se supone que no era ni la arena, ni la mezcla ni la termoarcilla las que estaban de buen ver.
Por lo visto, repitio la ingeniosa frase un par de veces más, para ver si mi señora se giraba, que no lo hizo. Y menos mal, porque no sé yo qué reacción hubiera tenido.
Porque lo peor del caso no es, claro, que un albañil te diga algo por la calle y te quedes cortada, no, lo peor es (ya se habrán dado cuenta) ese envenenado y traidor todavía .
¿Cómo tomarse la frasecita de marras?
En fin. Además de todo esto, mi mujer acaba de coger un constipado de esos que te cogen cariño y no te sueltan hasta pasado Mayo. Además, después de contarme todo esto, mientras engullía, le dio tiempo para tomarse el postre y lavarse los dientes y es entonces cuando el primogénito de la familia, oportuno como él solo, empieza a gritarme:

-Papá ¿mamá ha venido?

Eso, después de haber estado los cuatro juntos, más de media hora, en la misma habitación. Pero claro, una estaba comiendo y relatando y el otro estaba a lo suyo, hipnotizado con la tele (Kiterechu, Mirmo y los Héroes al Rescate) sin enterarse de nada.
Ay, señor, si es que hay días que más vale...

domingo, 15 de octubre de 2006

Una de enlaces...

Una de enlaces, para no perder la costumbre:

La Vivienda y el miedo, artículo de J. Ramoneda que publica en El País.
¿Se empezará ya a pensar en serio que este camino no es el correcto, que no se puede especular MÁS con el suelo y la vivienda, que no se puede construir en cualquier lado y de cualquier manera por mucho dinero que se tenga, que los Ayuntamientos no pueden vivir eternamente de las Licencias de Construcción, que el país no puede vivir sólo del sector de la Construcción, la especulación y las hipotecas bancarias, que la gente no va a poder afrontar sus préstamos de aquí a unos años en cuanto cambie la marea, que hay toda una generación empeñada hasta los ojos y que no verá luz a su túnel hasta pasados veinticinco, treinta o cuarenta años...? Por cierto, que soy de los que piensa que lo de Marbella no es único, basta mirar a cualquier Municipio y veremos cosas parecidas...

Física en la Ciencia-Ficción, un magnífico ( y denso) blog para ver si es verdad que Spiderman puede trepar por las paredes, si son posibles las arañas gigantes, los increíbles hombres menguantes o la visión por Rayos-X. Un enlace imprescindible para los amantes de la sci-fi.

Guía Ubuntu, por si te quieres pasar la lado libre del sofware y abandonas el reverso tenebroso de la fuerza. Estupenda guía para adentrarse en los misterios de Linux, Ubuntu, Debian, Gnome, OpenOffice y otros nombres que suenan un tanto a chino...

...y por si por casualidad te interesan ( o es que estás en ellas) la docencia y la Geología:
SOS Geología, más vale que lo leas pronto y firmes el Manifiesto. ...

...otro día más si eso
saludos

sábado, 7 de octubre de 2006

¿Qué hara ahí Dennis Hopper? (El anillo E)

Pues eso me preguntaba yo anoche cuando estaba viendo la nueva serie de la Sexta. Parece que la serie se suma a otras como el Ala Oeste, Señora Presidenta, o incluso 24, en las que nos quieren hacer ver cómo son los entresijos del Poder (y el Poder Máximo, que estamos hablando de los USA), quien y de qué manera mueve determinados hilos para que el mundo sea como es o, visto de otra forma, de cómo ser hipócrita cuando estás en el poder y seguir sonriendo como si nada. No sé si se trata de algo premeditado, en el sentido de intentar hacer campaña pro-americana dentro y fuera de las fronteras del país. No sé si se trata de que comprendamos decisiones incomprensibles a base de cierta popularidad mediática. No sé.

El caso es que el Anillo E peca de un maniqueísmo tan evidente que me hace recordar la Era Reagan, cuando Rambo era bueno, un héroe que no ganó la guerra de Vietnam (él solo, claro)porque no le dejaron los políticos (por cierto, que hace poco repusieron cuando se fue a Afganistán, a colaborar con los luchadores por la libertad que eran por aquel entonces los talibanes. Cómo cambian las cosas...). En este primer doble capítulo se soltaron unas cuantas perlas y cargas de profundidad entre reunión y reunión del comité que aprueba las acciones de los comandos americanos en cualquier parte del mundo. Cosas como (recito de memoria, así que no será, para nada, literal):

Boinas Verdes!¡Mi película favorita!
-Cuando nos fuimos de Vietnam dejamos muchos amigos abandonados y ahora están muertos.
-Ahora sí va a haber armas de destrucción masiva en Irak (refiríendose a cierto físico musulmán, amigo íntimo de Bin Laden, que va a pasarles la tecnología nuclear a grupos insurgentes irakíes).
*Homenaje de nuevo a Boinas Verdes, cuando se aplica el Método Fulton para llevarse a un prisionero (¿qué no conoces el Método Fulton? ¿no has visto el final de B.V.? ¿el globo, el prisionero, el avión...?)
*Alegre sabotaje sobre un barco de Green Peace (un barco lleno de hippies) que bloqueaba la salida de un portaviones americano. Por cierto, que el asunto se toma a chanza y aparece un representante del gobierno francés que no queda precisamente bien.

En fin, en mi modesta opinión, una serie más bien reaccionaria, excesivamente pro-yanqui, y que lo único que le falta es que aparezca el fantasma de John Wayne vestido de comando, o bien un Sylvester Stalollone a lo Rambo paseando por esos largos pasillos del Pentágono en busca de una misión de las suyas.

Lo que no comprendo es que hace un señor como Dennis Hopper en este sinsentido. Un actor reconocido, una leyenda que ha trabajado con James Dean, David Lynch o Francis F.Coppola, que ha intervenido en películas como Jhonny Guitar, Al Este del Edén, Easy Rider, Terciopelo Azul, Appocalypse Now, Rumble fish ....se deje meter en este embrollo para interpretar a un coronel que nos resulta más o menos simpático porque le gusta la música rock, que es continuamente puenteado por su subordinado (un Mayor de las Fuerzas Especiales recién llegado al mítico Pentágono) y por lo que su papel en toda esta historia no se entiende muy bien.
Aparte de sevir de gancho como vieja gloria en una serie de TV, poco más aporta su presencia. Y , la verdad, tampoco creo que su pase por la serie sea un gran dato para añadir a su carrera artística.
¿Trabajo alimenticio? No sé.
En todo caso, una decepción.

miércoles, 4 de octubre de 2006

Revisitando los clásicos:Jethro Tull

Lo que son las cosas. Un conjunto de sucesos confluyen en acontecimientos predestinados a ocurrir. O visto desde una óptica científica, dados ciertos valores para ciertos parámetros el sistema responderá con un suceso predecible.
En esta ocasión los valores iniciales han sido, en primer lugar, el hallazgo casual de una pequeña mina de música en mp.3 entre cuyas vetas he extraído unos cuantos volúmenes de artistas de otras épocas. Entre ellos mi otrora admirado Jethro Tull, comandado por el inigualable Ian Anderson. Es incréble la de música que ahora cabe en un CD normalito si está comprimida en MP3. Alrededor de 10,11 LP's de los de antes, de los de vinilo que había que guardar en urnas de cristal para que no cogieran polvo, que luego la aguja lo detectaba de inmediato. Qué tiempos.
Revisitar conjuntos cuya cima se encuentra a unos veinte o treinta años de distancia puede resultar una experiencia frustante y desalentadora y es por ello conveniente realizar esta operación con cierto grado de alejamiento emocional ( más de uno se ruborizaría con algunas viejas canciones si las escuchara atentamente hoy). Sin embargo, con esta gente, los Jethro Tull, el resultado ha sido positivo, muy positivo. Encontrar que todavía su música dice cosas, es capaz de sugerir y conmover, es capaz de atraparnos en las mil revueltas de las melodías de la famosa flauta travesera del buen Ian, supone una experiencia renovadora y vivificante. Volver a escuchar unas canciones que no sólo no han envejecido sino que siguen bien vivitas para quien quiera escucharlas, me lleva a creer en que merece la pena hacer buenas cosas, obras con talento e imaginación, que puedan perdurar y que puedan ser oídas por otras generaciones con la misma frescura y sorpresa. Y también, todo hay que decirlo, supone un punto de satisfacción para el propio ego, que de vez en cuando no viene mal.
Eso por un lado. Por otro lado, tenemos que en otro blog de por aquí cerquita, una bloguera amante de los pájaros ha resuelto con soltura cierto meme musical que le habían pasado anteriormente y no se le ha ocurrido otra cosa que pasarselo a un servidor. Y yo, que me convence cualquiera, acepté el pase del testigo. Otra cosa es para cuando, que a mi las prisas, como que no. Así que la cosa quedó aparcada hasta una ocasión propicia.Hasta que encontré la vieja mina abandonada del escocés, el ilustre señor Anderson (por cierto, el escocés ha tocado con su banda : flauta, guitarras acústicas y eléctricas, bajo, saxofón, órgano Hammond, batería, teclados, trombón, gaita escocesa, gran variedad de silbatos (flautines) y violín. Todo un portento. Además ha sido propietario de varias granjas de salmones. Una biografía sin desperdicio la de este hombre...)
Aquí es donde las coordenadas cartesianas de los dos ejes confluyen. Para quien quiera saber las bases del meme que pulse aquí, porque me voy a limitar a responder a las preguntas con los títulos de canciones y EP de la banda.

Tirémonos a las piscina.

A la de una, a la de dos, a la de tres...

1- Eres Hombre o Mujer?: Only Solitaire
2- Descríbete: Thick as a brick
3- Qué sienten las personas cerca de ti? Teacher
4- Como te sientes? Too Old to Rock 'N' Roll, Too Young to Die
5- Como describirías tu anterior relación sentimental? Living in the Past
6- Describe tu actual relación: Love Story's
7- Donde quisieras estar ahora? Walk Into Light
8- Como eres respecto al amor Fire At Midnight
9- Como es tu vida? Nothing Is Easy
10- Que pedirías si tuvieras solo un deseo? Singing All Day's
11- Escribe una cita o una frase famosa: Life is a Long Song
12- Ahora despídete: Back To The Family


P.D. Para cuando regrese de su retiro, me gustaría que Redivivo le echara pulso a este meme. No hay prisa.

martes, 3 de octubre de 2006

Releyendo:Los Pitufos

Intentando volver a cierto ritmo de publicación después de un laaargo verano y un mes de septiembre agitado, traigo aquí una de mis últimas lecturas o relecturas, Los Pitufos, de Peyo, que ha empezado a editar quincenalmente Planeta de Agostini (como muy bien comentan en Trazos en el Bloc , de donde me he bajado la imagen, por cierto, y espero que no les importe).
Hasta el momento creo que van por el número tres:

el primero de Oferta (Los Pitufos Negros),

y el dos (La Flauta de los Pitufos) y el tres (El Rey Pitufo) juntos por el precio de uno (7,95€).

Los demás (el próximo, La Pitufina) mantendrán el precio de 7,95 por volumen. La edición es en tamaño álbum y con tapa dura, así que me parece que por precio, edición y contenidos resulta más que recomendable hacerse con las aventuras de estos diminutos seres azules.

Para el que sólo conozca la versión de dibujos animados que han puesto en la tele de vez en cuando, advertirle que se va a encontrar con una obra diferente, ni tan infantil ni tan simplona, ni tan sencilla de entender si no se conocen medianamente las reglas básicas del idioma pitufo.

Tampoco se vaya a esperar, desde luego, humor corrosivo, ácido, cínico y duro (como tampoco sal gorda). Humor ingenioso y blanco, situaciones sorprendentes y divertidas, apartado gráfico más que notable. Una magnífica obra que puedes dejarle a tu hijo con tranquilidad y que después que él acabe te lo lees tú (si no lo hiciste en su momento, como a mi me ha ocurrido, al menos parcialmente).
La sonrisa está asegurada. Palabra.


jueves, 17 de agosto de 2006

Blogs temáticos de tebeos: mis recomendaciones(I)

Blogs temáticos en Tebelogs.

Tebelogs rebasó el otro día los 300 blogs afiliados y ahora mismo va sobre 307. Me imagino que cuando llegue septiembre y empiece el año (el año empieza en septiembre, todo lo más en octubre. Lo de las Navidades es una excusa para cogerse vacaciones en invierno. No hay solsticio que valga...) se producirá otra avalancha y en cuanto nos demos cuenta seremos más de quinientos. Eso está muy bien, salvo por el hecho que muchos blogs, me incluyo en el lote, tienen contenidos y noticias poco diferenciados. Además de la marea de blogs que tratan sobre personajes enmascarados con mallas, licra y con (sin) capa, que vuelan no se sabe cómo ni por qué, lanzan rayos de energía (solar, magnética, psiónica...) desde casi cualquier punto de su anatomía o que se pegan a las paredes como lapas, además de todos esos blogs que hablan, hablamos, del cómic de superhéroes (predominate en el mercado, a qué negarlo), existen otros que se han decantado por la especialización en otros géneros o en otros autores no tan asiduos del género. Y es digno de alabar ese intento de desmarcarse y mirar a otros mundos del tebeo.

El otro día mencionaba el magnífico ejemplo de La Cripta del Terror, dedicado a los cómics publicados bajo el sello de la EC. No es el único ejemplo de blog temático en Tebelogs. He encontrado, además,

El rincón de Mortadelón, que, como su nombre indica, nos acerca al trabajo de Ibáñez con los más famosos detectivos patrios (hasta que llegó Torrente, claro), Mortadelo y Filemón, agentes de la T.I.A. Está bien documentado y resulta muy agradable de leer.

En el mismo sentido, el de la recuperación de los tebeos infantiles de confección nacional que creo que todos hemos leido (los de la excelsa Bruguera: Pulgarcito, DDT, Tío Vivo...) tenemos una referencia obligada en Lady Filstrup . Un verdadero trabajo de investigación y erudición sobre la editorial Bruguera.

Cabe añadir, en esta misma línea, los blogs de El Gordito Relleno, o el de El Tío Vázquez.



Yéndonos a otro lado, también me parece recomendable acercarnos a los Blogs de autor, como estos dos dedicados a Richard Corben:

La Leyenda de Richard Corben y

La Leyenda de Jeremy Blood .

Heavy Metal, la película Para el que no le suene el nombre, decir que allá por los ochenta este dibujante era el top de los top, el no va más. Sus trabajos aparecieron en revistas como 1984, Zona 84 o Creepy y eran esperados con ansia por sus seguidores, que llegaron a ser legión ( y casi también sus detractores).

En Heavy Metal , la película de animación, se incluyó una versión “retocada” sobre una de sus obras más conocidas, Den.


Quizás lo más recordado de este autor sean sus colores, obtenidos mediante una técnica que por mucho que explicaran nunca llegué a entender, y las anatomías de los protagonistas de sus cómics, que podríamos calificar como mínimo de “exuberantes”y portentosas.

Lo que es la vida, Corben ha vuelto, al cabo de los años, a ser plato para minorías y no tantos se acuerdan de él. Estos dos blogs contribuyen a divulgar la obra de este autor, que no es poca cosa.

Y por hoy ya está bien.




Posiblemente el ordenador se coja unos días de vacaciones para una necesaria puesta a punto (he detectado un error misterioso que hace que se me corte la conexión al ratito...yu-yu yu-yu...). Volveré...

Crónicas marcianas.

Crónicas marcianas.

Lo primero que se nos viene a la mente si escuchamos estas dos palabras es el programa de la tele que se emitía a altas horas de la madrugada y por medio del cual se han hecho populares rostros que aún siguen apareciendo en la pantalla sin que nadie sepa, a ciencia cierta, a qué se dedican o qué aportes valiosímos han realizado a la comunidad para ser tan incesantemente asunto de grandes titulares y reportajes de investigación.

La maldita lástima es que no tanta gente conoce que Crónicas Marcianas es un libro de relatos escrito por Ray Bradbury entre 1945 y 1954, una obra que se considera, con razón, un clásico del género de la ciencia ficción. Tenía una deuda con él, desde que lo conseguí a principios del verano y hoy por fin he saldado esa deuda terminado el último de los relatos. 25 relatos ordenados cronológicamente (de Enero de 1999 a Octubre de 2026), nos narran la aventura de la colonización del planeta Marte. Un Marte soñado a finales de los Cincuenta, con una civilización marciana extraña, antigua y en decadencia, que sufre el embate de la invasión terrícola. Cada relato es autoconclusivo, aunque en algunos momentos se pueden encontar referencias a personajes o situaciones de relatos anteriores y, de alguna manera, parece que el autor ha intentado estudiar al azar unas pocas de las mil facetas que podría conllevar la llegada a un nuevo planeta, todas de alguna forma relacionadas y sin embargo independientes.

Flota en todo el libro una cierta sensación de pesimismo sin solución ante los comportamientos humanos. Porque, si nos ponemos a pensar, Bradbury parece que ha cogido Marte como una nueva Utopía desde donde analizar tranquilo las actitudes y acciones de sus semejantes, desde donde predecir, a partir de la propia experiencia colonizadora americana, el terrible choque que podría suponer el encuentro de civilizaciones planetarias diferentes. Lejos de describir cohetes y naves siderales, dispositivos de navegación, trajes espaciales o sables láser, se pone en el pellejo de lo que ocurriría si pudiésemos vivir en otro planeta y cómo lo haríamos. Y la respuesta es terriblemente convincente: haríamos lo mismo que aquí. Trasladaríamos nuestros mismos pueblos y ciudades, el mismo modo de vida, la misma rutina, no importa a cuantos millones de kilómetros, a través del espacio. Se levantarían las mismas ciudades de madera del Medio Oeste, tendríamos parecidas preocupaciones y temores, encontraríamos el mismo local de salchichas y hamburguesas del barrio de al lado, les pondríamos nombres terrestres a colinas y canales marcianos.
Veinticinco relatos, que van desde un par de magníficos párrafos (Intermedio, Los Viejos), un par de páginas (La elección de los nombres, Los músicos, El verano del cohete), a relatos algo más extensos(Los hombres de la Tierra, La tercera expedición, Encuentro nocturno, El picnic de un millon de años, Vendrán lluvias silenciosas, El marciano). Preferible, pero no imprescindible, leerlos en orden, si puede ser de noche, si hay suerte, con las estrellas y Marte de fondo.

Pintura de techos y paredes

Dicen que la necesidad es la madre de la ciencia. Y en parte, eso es verdad. Si no me hubiera visto en la obligación de coger el bote de pintura y el rulo, jamás me hubiera dado cuenta que tengo ciertas cualidades para el trabajo artístico sobre paredes y techos. No a nivel profesional, desde luego, pero sí para salir airoso del paso de tener que renovar la pintura de alguna habitación sin la obligación de contratar a nadie. Y no es por mera cuestión monetaria (que influye, desde luego), sino más bien por no tener que estar llamando continuamente a “profesionales” que prometen venir sin falta al día siguiente o a la semana siguiente y que si lo hacen, resulta siempre molesto meter gente extraña en la casa y que, además, en ocasiones, descubre uno que ciertas cosas las podría haber hecho casi igual de bien (a veces, mejor), con más cuidado o con más limpieza.

Desde luego, plantearse pintar una habitación (incluido techo) es algo como para pensárselo dos veces. Para empezar, desalojar libros y discos, vaciar armarios, mover muebles, desnudar paredes de todo tipo de cuadros, cerámicas decorativas, fotos o posters, envolver lámparas, colocar plásticos y papeles por todos los rincones...El lado positivo es la cantidad de objetos que redescubrimos, y la otra gran cantidad de cosillas que por fin podemos tirar sin miedo a la basura, después de haber pasado largos años atrincherados en armarios y cajones. En momentos como éste es normal que nos dé la fiebre minimalista. Será labor de cada uno sucumbir a ella o resistir y seguir atesorando objetos perfectamente inútiles.

En fin, a lo que iba. Para acometer el trabajo que estamos planteando harán falta una serie de materiales, unas pequeñas destrezas y unas pocas consideraciones que pasó a resumir según mi propia experiencia.

Materiales:

Hay que acudir a una casa de pinturas o a una droguería. Si ya se sabe lo que se quiera, también sirve el Hiper, pero prefiero el contacto directo con el tendero, que te puede explicar y aconsejar qué herramientas necesitas. De momento hace falta un rulo o rodillo, una pértiga, un cubo con escurridor para el rulo, alguna que otra brocha para rincones difíciles y yo aconsejaria también buscarse un pequeño rulito. Aunque parece una pijada inservible, para mi ha sido un magnífico descubrimiento insustituible para quicios de las ventanas o zonas de acceso complicado para el rulo grande y/o que no queremos hacer con la brocha.


Además hará falta pertrecharse de plásticos para envolver muebles y suelo, cintas de pintor para pegar plásticos o marcar filos de rodapiés, marcos de puertas... existen también rollos de papel (de distinta anchura) que ya traen una cinta para pegar. Son muy prácticos (otro gran descubrimiento).

Partimos del principio que vamos a trabajar con pintura plástica al agua. Hay marcas muy diversas. Yo recomiendo elegir alguna de marca conocida y, a ser posible, que no deje olores. Me inclino también por los acabados en mate, en lugar de los satinados o brillantes.
Se supone que en la casa ya tenemos una buena fregona, cubos, trapos y alguna espátula.


Procedimiento:

Puede resultar frustrante por el tiempo que se lleva pero lo primero de todo es envolver con plásticos mesas, sillas y armarios, colocar muy bien plásticos, mantas o sábanas en los suelos, enrollar rodapiés, marcos y ventanas, colocar un buen cartón debajo de la zona donde vamos a trabajar con los botes de pintura, rulos y brochas.
Los interruptores de la luz y los enchufes pueden taparse con cinta adhesiva o papel. Otra posibilidad mejor es quitar los embellecedores de enchufes e interruptores (haciendo palanca con un destornillador sobre unas lengüetas que tienen) y tapar luego lo imprescindible.
Es recomendable darle con la fregona al suelo y dejarlo húmedo (de esta forma, no se pegarán mucho las gotitas de pintura que caigan accidentalmente) y si hemos decidido cubrir con plástico, este se adhiere mejor al suelo si está mojado.

Toda esta serie de preparativos, en cierto modo tediosos, son necesarios si después no queremos pasarnos horas y horas quitando manchas de pintura de lugares insospechados. Porque manchar con la pintura es inevitable (el rulo salpica). A propósito, utilizar ropa vieja, guantes de goma, una gorrita para la cabeza y, si hace falta, hay unas gafas protectoras de plástico muy útiles si vamos a pintar el techo.

El rulo debe mojarse en la pintura que hemos echado sobre el cubo escurridor y mezclado con un poquitín de agua. Se supone que cuando hemos abierto la lata de pintura (por cierto, mejor comprar de más que de menos) la hemos removido bien.
Escurrimos el rulo y lo aplicamos a una pared.
El rulo debe deslizarse con suavidad, sin que deje goterones (señal de que la pintura está algo aguada). Si cuesta trabajo que dé vueltas habrá que diluir un poco más la pintura. Si estaba demasiado diluida, echar algo más de pintura pura.
Realizar varias pasadas en un sentido y, a continuación, cruzar con pasadas perpendiculares.
Si vemos zonas donde se ha acumulado más pintura (brillan más), aplicar de nuevo el rulo, hasta igualar con las zonas vecinas.

Una vez extendida bien la pintura (ojo que no queden goterones o grumos), comenzar con otra pasada al lado de la primera.
Mismo proceso: primero en un sentido, después cruzar y luego repasar. Así hasta acabar la pared.

En la intersección pared techo habrá que trabajar con el rulito o bien con la brocha. Los brochazos deben disimularse pintando primero hacia un lado y después repasando transversalmente, de forma parecida a como hacíamos con el rulo.

Los rodapiés también se pueden hacer con los mismos materiales. Deben tener ya las cintas correspondientes. No fiarse mucho de estas cintas, puesto que la pintura suele tener la insana costumbre de meterse por debajo y dejar manchas. Sería interesante dejar esta operación para el final, así, después de pintado el filo y después de esperar un poquito, podemos retirar la cinta y limpiar con un trapo mojado si han quedado manchas. Si esta operación se realiza pronto, es relativamente sencilla, si no, habrá que recurrir a la espátula, un buen estropajo y buenas dosis de paciencia.

Los techos, no lo he dicho antes, conviene hacerlos primero de todo, o bien de forma simultánea al trozo de pared por el que vayamos. Son difíciles, ya que tenemos pintar mirando para arriba, manejando el rulo con la pértiga más o menos extendida, seguramente nos mancharemos la cara y la cabeza (no olvidar la gorrita y las gafas protectoras), y caerán gotas de pintura al suelo (inevitable) o a las paredes. El proceso es el mismo que para las paredes: pintar hacia un lado, cruzar y repasar.

En habitaciones o techos nuevos, sin pintura, conviene dar una mano de imprimación , con pintura ligeramente agudada (aún así, extender bien para no dejar goterones de pintura, que luego la segunda mano no es capaz de disimular) y después dar una segunda mano más espesa.

Hay quien prefiere no “plastificar” el suelo y lo que hace es humedecer bien con la fregona y, cada cierto tiempo, volver a repasar con la fregona mojada. Las manchas suelen salir bien de esta forma. El problema es que hay que ir haciendo dos trabajos a la vez (pintar y limpiar) y que siempre hay manchitas que se nos escapan. Para trabajos rápidos puede servir. Yo estoy más tranquilo con el suelo lleno de plásticos.

Otra cosa, si tenemos que trabajas varios días seguidos o bien paramos para comer, todos los útiles de pintura (rulos, brochas, pinceles, cubos) deben mantenerse en agua. Y al finalizar, limpiar bien con agua, escurrir y volver a limpiar. Dejar secar y ya podemos guardarlos para otra ocasión.

Y estas son mis recomendaciones, basadas en la propia experiencia personal de estos ajetreados días.

martes, 25 de julio de 2006

La EC y La Cripta del Terror

Parece que el mundo del cómic americano (que es el que más se vende en este país o si no lo es, sí que es prácticamente el único que aparece en la calle, en los quioscos) se reduce a dos grandes compañías, la Marvel y la DC. Y, es más, parece que siempre ha sido así.

Sin embargo, existió un tercero en discordia, allá por los años cincuenta, la mítica EC, la Entertaining Comic. Allí trabajaron grandes dibujantes y se contaron grandes historias: de terror espeluznante, de intriga, de ciencia ficción, de hazañas bélicas, de crímenes donde no simpre el que la hace la paga... unos relatos plenamente actuales y que ha recuperado hace poco Planeta en breves colecciones tamaño BM que han hecho las delicias de muchos aficionados.


En lo que a mi me atañe, me decanté por la serie de Ciencia Ficción y quedé fascinado por la originalidad y madurez de los planteamientos argumentales, el desenlace final siempre paradójico e inesperado, el sentido autoparódico del que hacían gala en algunos números, el buen uso de la ironía, el humor y la complicidad con el lector. Se atrevieron a adaptar relatos de las Crónicas Marcianas de Ray Bradbury, por ejemplo, y lo hicieron con nota. Si estas magníficas historias vienen dibujadas por gente como Wally Wood, Al Williamson, Alex Tot, Joe Kubert o Fran Frazetta, el efecto resultante es magnífico. Si comparáramos cómics de la EC con los que podía estar publicando en aquel tiempo la DC o la Marvel (que me parece que por aquel entonces no existía como la conocemos, pero vamos, a efectos prácticos pensemos en los primerísimos números de los 4F o los Vengadores), creo sinceramente que la balanza caería en el lado de la EC: argumentos muy atractivos (mirar esta historia sobre alienígenas ) y dibujantes en estado de gratia plena. Puestos a pensar, se pregunta uno dónde podría haber llegado si no hubiera sufrido la caza de brujas que sufrió (estamos aún en tiempos del Senador McCarthy), una censura autoimpuesta (el Comic Code) y el vacío de distribuidores y vendedores.

Por estas razones me alegra encontrar una página en Internet, uno de los 293 Blogs que aglutina Tebelogs, dedicado en cuerpo y alma a la historia, anecdotario y avatares de la mítica Compañía: En la desarrollo de la EC, buen apartado gráfico rescatando portadas antológicas,

muy buena selección de enlaces, buenos artículos biográficos sobre guionistas y dibujantes... es difícil destacar un post de entre todos los publicados hasta la fecha. Puestos a ello, me ha llamado la atención el dedicado al dibujante Wally Wood, uno de los grandes, sin lugar a dudas:

Wally Wood: ciencia ficción y mucho más


Desconocía su triste final, y bastantes datos sobre su trayectoria profesional. Como que, además de dibujar estilizadas naves espaciales, astronautas intrépidos y mujeres de curvas vertiginosas,

se había atrevido a dibujar un poster (The Disneyland Memorial Orgy) en donde aparecen los principales personajes de la Disney en actitudes y situaciones más bien ....¿comprometedoras?...
¿quién iba a pensar que Blancanieves y los Enanitos...?¿o que Garfío, Peter y los Niños Pérdidos compartieran la misma mesa y el mismo interés contemplando un striptease de la casquivana Campanilla?...para los que sientan la misma sana curiosidad morbosa que uno , aquí van los enlaces (de la Wikipedia inglesa) (niños abstenerse):

http://en.wikipedia.org/wiki/The_Disneyland_Memorial_Orgy

http://upload.wikimedia.org/wikipedia/en/6/67/Orgy2.gif el enlace a la página en color , para abreviar...

En fin, un Blog que reune muy buena documentación (la práctica totalidad de los enlaces e imágenes de este post de allí proceden) , donde es un placer pasar de un artículo a otro, donde la sorpresa no deja de acompañarnos y que conviene apuntar en la lista de favoritos. (ah!, y no me pagan comisión por publicitarlo).

Una buena alternativa a la programación televisiva del verano...

domingo, 23 de julio de 2006

Revisitando los clásicos...

El otro día comentaba los hallazgos, casi arqueológicos, de Monster Blog.
Ya no se hacen cómics así: Probablemente tampoco puedan hacerse porque el público ha cambiado mucho en los cuarenta y pico de años que nos separan.
Lo cierto es que gran parte de ellos pecan de una inocente ingenuidad que cómo mínimo, nos hace esbozar una sonrisa condescendiente.
En otras ocasiones, se queda uno pasmao cuando descubre que la solución a algunas historias ha venido inspirada por la literatura o el cine, sin que aparezcan en los créditos mención alguna a la fuente original.
Así, por ejemplo, en Return of the Martian, el invencible Monstruo del Planeta Rojo ("Zetora, el Marciano") cae víctima de las insignificantes bacterias terrestres a los que los humanos ya nos hemos, mal que bien, acostumbrados. Si Wells levantara la cabeza...

En I am the Menace from the Purple Planet! dos extraños alienígenas salen de una nave extraterrestre, en presencia de la Prensa y el Ejército (norteamericanos, claro). La escena recuerda poderosamente al mítico film "Ultimátum a la Tierra".


Luego están situaciones como la siguiente, totalmente inverosímiles, aunque, eso sí, logran captar por completo la atención y el interés del posible lector.
¿Quién podría esperar que cuando al abrir la ventana para que entre el fresquito nocturno no sólo conseguiría que se le llene la habitación de mosquitos sino que corriera el riesgo de que se le colara un horrible monstruo verde aficionado al alpinismo urbano?


Por suerte, hay temas que con las debidas modificaciones pueden actualizarse con relativa facilidad.
¿Y si en vez de un monstruo verde descubriéramos horrorizados que quien se nos quiere meter en la salita es nada más y nada menos que....

....un horrible ¡¡Cuñaoo!! en mi ventana...

Pues eso, que entonces la cosa cambia.
Los clásicos, siempre los clásicos....

P.D. Ya puestos, me he entretenido en introducir Siete Diferencias entre las imágenes del Monstruo trepador y el Monstruo Cuñaoo. A ver si dais con ellas...

Posted by Picasa

jueves, 20 de julio de 2006

SUPERMAN HA VUELTO!!

-¡¡SUPERMÁN HA VUELTO!!


Pues no, no voy a hablar de la película de Bryan Singer, que para eso mejor mirar en el Blog del Chacal, por ejemplo.

Además, yo todavía no la he visto, así que esperaré a criticarla en su momento ( y ya que últimamente sólo veo en el cine películas de animación, bien acompañado, eso sí, habrá que esperar a tenerla en DVD en casa...no hay prisa...)

Así que la frase no iba por la peli, sino que fue una exclamación que lanzó mi mujer cuando...



...pues no, tampoco es eso, malpensados, que me lo dijo por la mañana, justo antes de la hora de la comida ( y no volvais a ser malpensados, recordad: mente limpia, mente limpia...).

No, la exclamación no era esta vez por eso (otras veces que lo ha sido. Ahora sí podéis ser malpensados. ), sino porque en un plisplas había montado yo solito-con mis manitas, unos trozos de cordel, unas arandelitas y unos alicates- un magnífico toldo de tela de sombreo (unos 7 x 2 m., color caña, precioso) en la terraza que da al dormitorio y que, a la vez, es parte del techo de la cocina y de la salita. Poner ese toldo supone una solución sencilla al problema de las calores veraniegas. Evidentemente no es la receta milagrosa y sigue haciendo calor, pero ya, al menos, no se recalienta el techo de la cocina, ni del salón, ni tampoco la pared del dormitorio. Parece que no pero se nota.

En fin, que tampoco es que sea mucho lo que hice (aunque me quedó francamente bien, eso hay que reconocerlo), sino que la frase, inesperada, con ese tonillo peculiar que yo me conozco, supuso una palmadita en la espalda que me animó para el resto del día. Me volvió a recordar lo importante que es decir algo, aparentemente sin importancia, en ciertos momentos, y lo bonito que es ser ligeramente ( o muy) egocéntrico en ocasiones.

Por la tarde, entusiasmado, cogí el rodillo y el bote de pintura y me puse a darle a la fachada. Mentalmente, tarareaba la musiquilla de John Williams:

Tuuuu-tutututú-tút-tút-tút

Tuuu-tutututú:

¡¡ TÚT-TUT-tut!!

...

( Agradecimientos: He birlado las imágenes del Blog del Chacal y del Madrid Fuego Infernal, dos buenos blogs que conviene visitar)