viernes, 19 de agosto de 2005

Más mutaciones


El tema da para escribir libros enteros ( y de los gordos). Así que esto no es más que una versión resumida y muy abreviada de lo que se me ocurre ahora mismo.

LAS MUTACIONES.
Estrictamente, una mutación es cualquier alteración de un código genético “normal” producida de forma “espontánea” o bien “inducida” por algún agente mutagénico.
La forma “natural” suele estar aparejada a que el ADN debe duplicarse cada vez que una célula entra en división y en este proceso, aunque hay un sistema de reparación de errores bastante eficiente, hay veces que “desaparece”una letra, o se duplica, o se cambia por otra.
La mutación puede ser también inducida por medios externos. Las radiaciones o agentes químicos mutagénicos suelen ser los responsables de estos cambios.

La alteración del código genético puede que no revierta importancia porque no afecte para nada al funcionamiento de lo que dictaba el código antes de mutar.
O puede que sí y sea perjudicial porque ya no funciona lo que tenía que funcionar.
O, a veces, puede resultar ventajosa porque lo que tenía que funcionar lo hace ahora mejor que antes.
¿Qué es eso que tenía que funcionar? La respuesta clásica sería el funcionamiento de una enzima (una proteína que cataliza una reacción bioquímica), pero de forma general, estaríamos hablando de proteínas (de las cuales, las enzimas son sólo una “familia”) y como consecuencia general, puede afectar a cualquier faceta del desarrollo y fisiología/morfología del organismo en que intervengan proteínas. Vamos, practicamente todas.

Si la mutación ha afectado a células somáticas (que podráin ser desde unas pocas a, hipotéticamente, todas las de un individuo) en el transcurso de la vida del individuo, la trascendencia queda reducida a ese individuo, puesto que la herencia viene dada por las células reproductoras, los gametos, que van un poco aparte del resto. Algo así le pasóa a Peter Parker: han mutado sus células “corporales” (somáticas) adquiriendo refeljos de araña, musculatura proporcional, sentido arácnido, etc. Pero, siendo estrictos, la mutación no debería afectar a la carga genética de sus espermatozoides (que esa no varía por mucho que haga en la vida). Si tiene hijos con MJ Watson, no tendrían que ser más especiales que los míos.

Si la mutación se ha producido en las células germinales, gametos (espermatozoides u óvulos) entonces la variación se puede transmitir a la descendencia, con sus efectos positivos o negativos. Parece que ese es el caso de los “mutantes-X”, que son así porque han nacido de esa manera. Su progenie puede ser “normal” o “mutante”.

LOS GENES
La información genética va, digamos, empaquetada en forma de capítulos de un libro. En esencia, todos los seres humanos tenemos escrito el mismo libro con los mismos capítulos que hablan sobre el color de la piel, del iris, del pelo, de cómo debe ser nuestro hígado o qué altura (potencial) podremos alcanzar. Sin embargo, no todos somos iguales, de hecho todos somos diferentes, aunque con unos patrones básicos similares. ¿qué ocurre?
Estos capítulos del libro hablan de lo mismo, pero no dicen lo mismo. En el capítulo del color del iris habrá quien tenga escrito que será azul, otros que lo será verde oliva, otros que si marrón oscuro. El título es el mismo pero lo que se cuenta dentro es, más o menos, distinto. En terminología genética, cada capítulo coresponde a un gen, y cada versión de ese capítulo se llama alelo.
Y ahora es cuando intentamos enlazar con lo anterior: un alelo no es más que una versión mutada de un gen original. Donde decía ojitos azules, ahora se lee ojitos verde clarito. En el curso de la evolución humana el gen que codificaba el color del iris mutó, de manera que a partir de entonces existía una versión que propiciaba que se produjera más ( o menos) melanina en el iris. Y a partir de ahí pudieron darse nuevas variantes.
En principio no hay alelos “superiores” ni “mejores” que otros, a no ser que algunos lleven escrita una alteración que desemboque en algún tipo de enfermedad.
Todos somos mutantes.
A ver si con un ejemplo....

El albinismo en el color del pelo o de las plumas sucede de forma espontánea en numerosas especies animales (palomas, canarios, conejos,perros...mismamente). ¿Son mejores las variedades albinas que las formas “normales”? Pues...depende. Un conejo de pelo blanco tiene poco que hacer en nuestros montes. Pero si ha nacido en Siberia, tiene más papeletas para camuflarse y escapar de sus predadores que su congénere mediterráneo.En evolución no hay (aunque sea una idea extendida) ni mejores ni peores. Depende del medio en que se desenvuelvan.

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