Manias...

Bien. Tenía pendiente un encarguito de parte de Redivivo, una cadena que va recorriendo la Blogosfera por la cual nos enteramos de las cinco principales manías de cada cual (encabezando el post, el mensajero que me dejo aviso del "encarguito"). Pues nada aquí estamos, delante de Jueces y Jurado, dispuesto a exponer mi caso...

1. Creo que sufro un pequeño complejo de Diógenes:lo guardo todo, lo acumulo todo. Pueden ser cómics, apuntes de hace veinte años (sin exagerar), libros, piedras, algun fósil, plantas prensadas, juguetes desarmados (de mis hijos, los míos ya no han sobrevivido)...cualquier cosa es buena para que la guarde y me olvide de ella hasta que pasen años y la vuelva a encontrar.Empieza a ser una manía preocupante, más que nada por la disminución de espacio vital que conlleva .
2. No sé si de forma independiente o ligado a lo anterior, soy tremendamente desordenado. Antes me escudaba en la famosa frase (-Aunque no lo parezca, todo está en su sitio y sé dónde está cada cosa:es un desdorden ordenado), pero ya prescindo de excusas y eufemismos: Soy un desorden andante. Intento corregirme, a veces, y me dan ataques de limpieza y organización, que, afortunadamente, duran poco, de manera que pronto todo vuelve a la normalidad (la entropía es lo que tiene...al final siempre gana).
3. Para completar el panorama, a veces me comporto como un coleccionista compulsivo incompletista . No importa de qué. Si me interesa la jardinería, acabo consiguiendo Guías, Manuales, Tratados y Enciclopedias del tema de las flores. Si el arrebato es de Geología, pues casi lo mismo. Si son cómics de Kirby, por ahí tengo las BM de El Cuarto Mundo, que no me atrevo ni a leer.
4. Decía antes coleccionista compulsivo incompletista. Veleidoso que es uno, y ansioso que también, los arrebatos no me duran lo suficiente como para acabar de completar lo que sea. Algo pasa por medio que roba mi atención, con lo cual, olvido mis iniciales desvelos para que otro objetivo cubra mi desesperación. Al final no acabo de enterarme nunca del todo de nada.
5. Unido a todo lo anterior, inconstancia en mis propósitos. Un Veleta.
   Así tengo el Ordenador (algún día habrá que limpiarlo de verdad, por dentro y por fuera), la habitación (hay que ver que ya no tengo espacio en las estanterías ¿y a mi cuando me ha gustado la Jardinería?), la casa, el coche...este Blog medio abandonado...

No sé qué debio ver ( o más bien no ver ) mi señora esposa para acceder al Matrimonio con esta joya. El amor, que dicen que es ciego. Eso será.

En fin, si alguien quiere continuar la rueda de las manías, yo propondría (si me leen y si así lo desean) a
Caboblanco

Maruja

Proudstar